Bueno. Bienvenido nuevamente. Espero que le haya resultado interesante la evaluación. Vamos a pasar un poco de tiempo hablando sobre cada uno de los tipos de personalidades económicas. Empezando por…
El acumulador
A un “acumulador” le puede resultar difícil gastar dinero en cosas que ellos consideren “adicionales”, o placeres para ellos y sus hijos. Pueden tener dificultad con la idea de tener que usar algo de sus ahorros para pagar los gastos de su pareja o sus hijos. Pueden sentir resentimiento y hacer acusaciones de que la ex pareja solo está interesada en su dinero.
El gastador
Un “gastador” puede tener dificultad para ahorrar, hacer un presupuesto y postergar la gratificación para alcanzar sus metas a largo plazo. Le puede resultar difícil tener un presupuesto para hacer pagos de manutención si no cobra el sueldo en el primer día del mes. Es posible que haya valorado sus propios deseos y necesidades por encima de sus responsabilidades financieras, y que como consecuencia tenga pagos atrasados.
El monje del dinero
Un “monje del dinero” puede evitar tener demasiado dinero y sentirse culpable si recibe una gran cantidad de dinero inesperadamente. Un padre o madre de este tipo puede sentir culpa al aceptar el monto de manutención de los hijos indicado por las pautas de manutención de los hijos, y como consecuencia acepta recibir un monto menor, decisión que afecta negativamente el nivel de vida de los hijos. Los monjes del dinero pueden tener dificultad para representar sus propios intereses en una negociación de división de bienes.
El evitador
Un “evitador” puede tener ansiedad o sentirse incompetente en cuanto al manejo de dinero, y tiende a evitar tener que hacer varias tareas cotidianas relacionadas con el manejo del dinero. Una persona de este tipo puede ignorar pedidos del otro padre de contribuir a los gastos especiales de los hijos, no porque no tenga dinero, sino porque prefiere no lidiar con el asunto. O, las cuentas permanecen sin pagar, resultando en el corte de servicios públicos y una acumulación de deudas o declaración de quiebra.
El amasador
Es probable que un “amasador” esté demasiado preocupado por tener grandes cantidades de dinero a su disposición para gastar, ahorrar e invertir. Una persona de este tipo puede sentirse resentida de tener que pagar manutención sin que haya una orden de manutención. Puede usar tácticas para demorar los pagos de manutención lo más posible. Puede sentirse con derecho a quedarse con el dinero que gana y estar dispuesto a arriesgarse a que un juez decida la manutención o la división de bienes en lugar de participar en mediación. Es posible que solo pague el monto obligatorio de manutención de los hijos, y que se queje si tiene que pagar por algún gasto especial de los hijos.
Estos tipos de personalidades no tienen la intención de ser una explicación exhaustiva de por qué las personas gastan, ahorran o manejan sus finanzas. Solo ilustran algunas de las maneras distintas que las personas pueden pensar y actuar en cuanto a los asuntos económicos.
Echemos un vistazo a tres casos para ver si usted puede identificar las personalidades económicas.